Una intervención sistémica permite revelar aquellas dinámicas relacionales inconscientes que dificultan el fluir natural de la energía en una organización.
Esta visión de la empresa y de la organización tiene como propósito preservar el equilibrio del sistema, asegurar su existencia y promover su crecimiento.
Cuando se mira a la empresa como un sistema, se declara que se visualiza a todas las partes de éste: Los dueños, los fundadores, los directivos, gerentes, gestores o ejecutivos, colaboradores, trabajadores, como también a las diferentes gerencias, departamentos, divisiones, filiales e incluso a los proveedores, a los productos, proyectos, a los clientes, como también mercados vinculados de manera interconectada e interdependiente, o a la competencia, ya que forman parte de la industria (Sistema). Esto significa que todas las decisiones y acciones afectan a la empresa en su conjunto y al entorno al que pertenece.
Naturalmente los seres humanos se comportan sistémicamente; aunque no siempre se tiene conciencia de pertenecer a diversos sistemas y sub sistemas, siendo el primero de ellos, la familia. A través de comportamiento sistémico se asegura la pertenencia a éste. En las empresas la lealtad al grupo, la adherencia a la cultura, a las normas, el cumplimento de los compromisos, la colaboración y el “accountability”, son formas de lealtad y capacita a las organizaciones para trabajar.
Cuando realizamos “coaching sistémico” o constelaciones organizacionales en una empresa, por ejemplo para los socios, lo hacemos con el propósito de identificar eventuales dinámicas relacionales que no estén siendo evidenciadas a través de otras herramientas de intervención utilizadas hasta ahora, como también facilitar las conversaciones que necesitan llevar a cabo para favorecer el entendimiento entre ellos y viabilizar un camino de acuerdos satisfactorios para ambos y para la productividad de la empresa.
Lo hacemos también como forma de obtener información que nuestra habitual manera de ver y pensar linealmente, en la lógica de causa y efecto, no nos permite ver; nos permite tener consideraciones para la toma de decisiones que se develan de manera casi exclusiva y muy poderosamente con esta herramienta. Podemos decir que con esta metodología se puede “ver lo que es”, por lo que la imagen interna del cliente acerca de un sistema determinado aparece claramente, sin lugar a dudas y la aceptación o negación de esa realidad puede ser la materia prima para una intervención colectiva o para un trabajo personal muy profundo.
Los beneficios de esta facilitación sistémica son entre otros:
- Obtener información relevante para la toma de decisiones;
- Permite orientarse a la solución;
- Es de aplicación rápida lo que disminuye tiempos de intervención y por ende los costos;
- Es complementaria y “conversa” perfectamente con cualquier otra herramienta o mapa que se use;
- Favorece la comprensión y entendimiento entre los participantes, más allá de las diferencias;
- Darse cuenta de las influencias y causas de la historia, cultura, paradigmas, hechos relevantes, exclusiones, desequilibrios que pueden estar operando en cada uno de los sistemas (familiares y organizacionales) y subsistemas de cada uno de los elementos, facciones y partes de la relación entre los socios, que influyen de manera inconsciente en su relacionamiento;
- Induce a la toma de conciencia o insights en el cliente;
- Muchas veces un análisis racional nos da pistas o partes del problema, pero no la visión global. A veces hay dinámicas ocultas que tenemos dificultad en reconocer. Con la Metodología Sistémica podemos tener una visión general del problema y descubrir esas dinámicas;
- Ayuda a mirar hacia la misma realidad con otros ojos;
- Se trabaja de una forma sintética, sencilla y rápida;
- Se trabaja con poca información “descriptiva”;
- Se mira hacia el sistema como un todo;
- Se analiza la interacción entre los elementos del sistema y entre éstos y el sistema;
- Se busca el equilibrio del sistema;
- Que los socios tomen fuerza para realizar las acciones y tomar las decisiones que la circunstancias ameriten.
Los objetivos principales son:
- Obtener información para establecer un diagnóstico más acotado, respecto de las dinámicas relacionales, eventualmente ocultas, que pudieran estar originando conflictos o dificultades, permitiendo orientarlos hacia la solución satisfactoria para las partes involucradas, de manera armónica y pacífica para todos.
- Buscar puntos de consenso y convenir maneras de trabajar, de acuerdo a los intereses particulares de los socios y al bien colectivo de la sociedad.
- Revisar qué tipo de dinámicas pueden estar operando y qué intereses legítimos y contradictorios pueden estar en juego, tanto en las relaciones familiares como societarias que se superponen.
- Facilitar las conversaciones y solución de conflictos que permitan la armonía de los participantes.
- Descifrar los eventos que suceden en el sistema cuando son síntomas y cuándo son el problema en sí mismo.
- Identificar los recursos con los que cuentan –no solo materiales- para afrontar las dificultades entre los socios y con el equipo.
A veces puede resultar interesante ocupar una de las técnicas de la facilitación sistémica, para lo cual se puede recurrir a colaboradores de la empresa que participan representando elementos que los consultantes o clientes definen previamente, sin saber a quién o qué representan. Esta resulta una herramienta tremendamente relevadora de información valiosa para los clientes, que les permite tomar decisiones adecuadas a las circunstancias que viven.
COMO ES Y COMO SE HACE LAS CONSTELACIONES SISTÉMICAS
1 Entrevista (cliente- facilitador)
2 Se define el tema, el sistema y los elementos
3 Se hace la representación del sistema del cliente
4 Se analizan las dinámicas principales
5 Se testean alternativas
6 Se hacen intervenciones para traer equilibrio y armonía al sistema
7 Se muestra la solución o el camino para la solución.
También se puede trabajar con elementos u objetos que representen los distintas partes del sistema, que reflejan la imagen interna- habitualmente no consciente- del cliente.